ROCÍO L’AMAR, 1964, Chile.
Sus poemas y cuentos :
Ilustraciones de Rocío L´ Amar
OYE
en ese modo de atesorar lauros jugaba con la puntería
del vistazo
era el afán y la sopladura
embrujamiento quizás
persistentemente móvil que tiene casi siempre el ojo
cuando anda buscando cruzarse con esa
diosa poética
en los rincones
allá acá allí aquí acullá
soy tan poco civilizada en relación
a los mosquitos que nacieron dentro de mi boca
en ciclos en alternancia en pejiguera en flirt
aunque alguna vez también llegaron en esa urgencia del tiempo
como si yo fuera un copista tras la eufonía del poema
para el pandemónium el aquelarre al sur
al norte el cordón a tierra ese centelleo ahorita
ahorita
desvirgándose en el éxtasis
relumbrón reluciente algo así como teatral
ese rouge sólo me ha dejado
un leve indicio
de
un
affaire.
Rocío L´ Amar
ARCO IRIS
aunque afloje todo alarde lingüístico
mi lengua tiene plural primas hermanas
a p u n t a l a m i e n t o
m o v i m i e n t o s
que me inculpan
que hacen del silabeo una gotera
un bombazo de luz
en shock
no hay sostén metafórico ni rayado de cancha
ni glamour de barbie
castiza
como maderita de ciprés soy una piragua rasgando el río
me denuncia a ratos el hueco de mi boca
esas aves en las ramas del silencio
este poema
armando lío en el moulin rouge
al pie de montmartre
estirándome
y
succionándome
como si fuera zsa zsa gabor
en el infierno strepticero en parís
la luna es sinónimo de franchuta la risitas puertas afuera
pajarraca sinvergüenzota cuando atiza
usted habla de la muerte
que jamás ha visto excepto en el cine
mudo
quizás podrá mover muchas cosas de lugar
pero yo siempre veré el arcoiris.
Rocío L´ Amar
SOPITA DE LETRAS
obedezco a mi señor como si fuera mi señor
un poema viudo a la luz de las imágenes
da su vena ad hoc para la noche
afín
sinfín
y sin fin
lo que escucha son ángeles hermosos
y el envés del día mosconea laralalalaaa entre los molares
ay de mí
y la lengua rezongona farfullenta mal
diciente espartana loca en frase de mi señor soy una geisha
en su territorio
no quiere la sopita de letras quiere lo mío.
Rocío L´ Amar
CHICA BOND
007 aparece en la cabaña
como un pájaro que exagera los suspiros y desatranca la noche
y sus historias afuera adentro son ojitos
que persigo en silencio
en un ajuste de miradas
esta vez
hay luna
guachito
por
alguna razón nos respiramos un bonjour al más puro salvajismo
nos encañonamos el esqueleto
nos hurgamos bocabajo
con y sin licencia
encajonamos
ese
za
fa
r
rancho
a muerte
soy una chica bond
engrillada
al recuerdo, au revoir, mon amour.
Rocío L´ Amar
Cuando se pide con fé no hay mujer que no lo dé.
Adagio
La manía por llegar antes de la hora señalada, me permite leer los diarios locales, tomar un cafecito y fumar, sin ningún apuro, y así, aunque sea mentalmente, le doy un toquecito de distracción y placer a mi trabajo, lo suficiente, para soportar los agotadores viajes por todo el país.
Se quedó mirándome y extrajo del bolsillo posterior de su pantalón una agenda de turismo, de esas que se venden, desde siempre, en los quioscos de revistas, pequeña y agradable, pero le hice un ademán, lacónico y desarticulado, que esperaba el tren y quería estar solo.
- Monsieur, dijo, mientras me observaba con esa blandura que tienen los turistas acostumbrados a preguntar a los transeúntes, sin una pizca de castellano, a quelle heure part le train pour Santiago?
Contuve el aliento, y le mencioné la hora, sin embargo permaneció un momento inmóvil como si detrás de él algo se quebrara en un rincón, pero en vez de alejarse, avanzó hacia mi mesa, tomó mis cigarros, sacó uno, lo encendió, y se guardó la cajetilla, mientras me dedicaba la sombra de una sonrisa complaciente.
Al principio, reconozco, justifiqué el hecho de buscar un amigo y compañía en un país extranjero, cuántas veces yo mismo lo hice en tiempo de mi juventud, pero una cosa era evidente, no había sido invitado cuando se sentó abruptamente y se dobló sobre la mesa para beberse mi café y comerse mis tostadas, así que de inmediato me aparté del lugar, con la boca seca y endurecida.
Después de veinte minutos partió el tren. Me pasé despierto casi toda la noche, sin saber cómo desligarme de esta absurda ansiedad. Mi corazón palpitaba con violencia. Un primo me había asegurado, de un modo fácil y claro, que aquella escritora, la que tenía el acento dulzón en la última conferencia sobre Arthur Rimbaud en la Universidad , se marchaba a París, pero antes deseaba encontrarse conmigo, que me citaba en el hotel La Castellana en Santiago. Uf, no sé cuántas decenas de veces he repetido su nombre y como en un trance hipnótico he llevado mi insomnio de paseo.
La estación de Santiago apenas se sostiene de pie en la madrugada, a causa de la multitud que ha ido mermando los viejos adoquines, mientras yo, parado en medio del pasadizo, me esfuerzo por recordar la dirección del hotel.
Cómo entenderlo, pero estoy nervioso, me duele la cabeza, el cuello, la cintura. «¡Nada de eso ahora!», me increpo, y me apresuro en tomar el Metro y buscar la dirección.
Por una calle, por otra, llegué hasta el hotel, que no era un hotel, sino una casona antigua, toqué el timbre, que se hizo más perceptible cuando se abrió de golpe la puerta y apareció un niño pelirrojo, de unos tres años de edad, vestido en pijamas, me examinó repetidas veces antes de gritar hacia el interior, entonces se asomó una mujer de avanzada edad, mordisqueando un pedazo de pan, pregunté por ella, y un asomo de duda se reflejó en sus ojos.
- Mademoiselle está durmiendo, dijo.
- Se trata de algo absolutamente concertado, contesté.
- Pero Mademoiselle está durmiendo, insistió con aspereza, y cerró la puerta.
Volví a la calle. Entre las ocho y las diez estuve caminando por los alrededores.
A las diez con cuatro minutos, decidí volver. Me disponía a subir nuevamente los escasos escalones de la casa, con unos bombones que había comprado en una dulcería de la esquina, cuando el ruido de la puerta atravesó mis oídos, y me quedé inmóvil.
Aquel hombre, que me había escamoteado en la estación de Concepción, bajaba los escalones, de la mano del niño pelirrojo y la hermosa francesita, Marguerite.
Rocío L´ Amar
Bienvenida a este tu rincón y él de todos los que escribimos y tenemos ganas de participar y decirle al mundo que estamos aquí a traves de poemas, relatos, cuentos etc...
ResponderEliminarGracias por tus poemas bellos y cuentos....
Un saludo
Santiago
Bienvenida Rocío a esta tu casa amiga,un lugar de encuentro.
ResponderEliminarEs muy grato leer tu obra desde este espacio virtual.
Abrazos de MA para ti y para todos los escritores de Alrededor.
ha sido un gusto amigo santiago poder conocer de tu mano a esta escritora,me han gustado mucho sus escritos,felicidades para ella y para ti por brindarnos este espacio para disfrutar de las letras.
ResponderEliminarun fuerte abrazo y que pasen todos un bonito dia!!!!!!
Es un placer Rocío, contar contigo en este espacio... que después de leer estos maravilloso versos y prosa. Nos ayudarán a que cada uno nos podamos pulir cada día. También te doy la bienvenida como Santiago, -aunque es el espacio del- pero como conlocía alguna cosa tuya. Es una buena manera de aumentar nuestra creatividad y nos sentemos como si estuviésemos en nuestra propia casa.
ResponderEliminarUn fuerte abrazo desde Galicia.
Bienvenida a este espacio creado por Santiago y también, un poquito, por todos los que aquí estamos alrededor de él.
ResponderEliminarUn fortísimo abrazo.
gracias, Santiago, por difundir mi trabajo literario; MA, por tus conceptos y bienvenida; Sony, por tu opinión; Quino, por engordar mi ego, jajajaja; Towanda, por tu calidez...
ResponderEliminarGRACIAS a todos, se siente magnífico estar en una casa literaria tan armoniosa, con anfitriones cordiales y afectivos. reciban mi abrazobeso de luz desde Chile, Ro
Bienvenida al Mundo de Santiago. Un estilo nuevo, retador, por el cual se muestra la poesía dueña de la palabra, en un mundo saturado de expectativas en cada verso. Gracias por compartir. Saludos cordiales.
ResponderEliminargracias María, la "señorita personalidad", es decir, mi poesía os lo agradece, la estética es nuestro afán... bss, Ro
ResponderEliminarEs un placer conocer tu trabajo, Rocío.
ResponderEliminarUn verdadero placer que hace de este lugar un rincón lleno de belleza.
Besos.
Ro, amiga, que menos podía esperar de vos!siempre me han gustado y me gustan tus trabajos,ensayos,entrevistas...
ResponderEliminarun muy grande abrazo,besos de la suegra
lidia-la escriba
gracias María, la del sombrero rojo, jajajaa... he buscado la belleza, estimada amiga, desde que abrí los ojos a la poesía... largo camino, de luz y de sombra, ... lo que leéis es el resultado de años de trabajo disciplinado... bss, Ro
ResponderEliminarholaaaaa suegraaa, feliz de verte... Lidia querida, PRECIOSA gracias por amarme, besitos, Ro
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